Megaproyectos que ponen en riesgo la habitabilidad de las comunidades: en el marco de la Caravana, fue frecuente escuchar las preocupaciones de las comunidades tanto afro como indígenas sobre las proyecciones económicas que existente sobre los territorios, en especial las agendas de desarrollo, entre las que se establecen: el Tapón del Darién, La Panamericana, Canal Truandó y la Interconexión Eléctrica, esto obedece a que son obras y reordenamientos del territorio, que no conversan con los planes de vida y prioridades de las comunidades étnicas; además de las amenazas y daños al territorio, la cultura, la identidad y tejido social que pueden representar.
El declive de la economía local, la explotación maderera- minera y los cultivos de usos ilícitos: el declive de la economía local, la continuidad del conflicto y el inexistente apoyo estatal, ha conllevado a que la sobreexplotación madera se convierta en una actividad creciente en la zona, afectando el territorio e incrementando la inseguridad alimentaria. Además, son las empresas las que regulan el precio, dejando a los locales sujetos a las dinámicas de quiénes compran el producto, sin necesariamente tener relaciones económicas justas
